JESÚS POBRE- MONTGÓ POR EL BARRANCO DE LA HIEDRA

DÍA LLUVIOSO EN LA CUMBRE DEL MONTGÓ

FICHA TÉCNICA-

Día: 09/10/2016
Participantes: Julián y Lourdes.
Tiempo estimado: 4 horas y media.
Distancia: 11 km.
Dificultad: Media.
Punto de inicio: Desde Elche, dirección a Valencia, por la autopista A7 hasta la salida en Jávea. Antes de llegar al pueblo hay una rotonda en la que debemos ir a la izquierda en dirección a Jesús Pobre. Rectos hasta enlazar con la CV  735, Denia-Jávea. Salimos hacia la derecha y a 30 metros entramos en el primer cruce, a la izquierda, aparcando en una explanada.
Wikiloc: http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=15051061

ITINERARIO: Explanada de la Urbanización - Depósito - Cruce hacia el Barranco de la Hiedra - Cruce hacia el Montgó - Cruce hacia la Cruz de Denia - Cueva - Cruce hacia la Cruz de Denia - Cruce hacia el Barranco de la Hiedra - Cruce hacia la Cova de l'Aigua/Denia - Cova Ampla - Explanada de la Urbanización

RUTA:

Aparcamos el coche nada más salir de la carretera CV 735 que va de Denia a Jávea por el interior (no por la costa). Hay una explanada a mano derecha. 

El Montgó tiene su cumbre encapotada, pero aquí llover, imposible. Por si acaso cogemos los chubasqueros.

Iniciamos la caminata tomando el ramal asfaltado que sube dirección a la montaña y con un giro a la derecha se sitúa al lado de un depósito.

Pronto encontramos a la izquierda el comienzo de un camino empedrado que lleva dirección a la sierra. Saltamos por encima de la cadena y caminamos unos pocos minutos, pero empiezan a caer unos grandes gotas de agua, ¿qué hacemos?, ponernos los chubasqueros y proseguir. Apenas dura unos minutos.

A la derecha se encuentra el cruce que nos llevará por el Barranco de la Hiedra hasta la cima del Montgó, es una ruta inédita para nosotros, perfecto. Nos encanta subir a las montañas ya conocidas innovando, buscando alternativas diferentes. 

 






















El sendero se bifurca enseguida y nuestra ruta es hacia la izquierda.

Está muy bien indicada la entrada al barranco de la Hiedra con pintura amarilla y el sendero pisado que pone patente su uso habitual por senderistas. El GPS no sabemos si pierde satélite pero nos quiere llevar un poco a la derecha, no hay otra senda, esta es la única.

Ascendemos entre una bonita pinada, hacia atrás la visibilidad es escasa, justo se ven la sierras de Pedreguer, de la Solana del Castell, el resto están tapados por la niebla, lo justo se ven los pueblos.

El recorrido va tomando un cariz montañero, el desnivel se acentúa y aparecen las pedreras, pero sin ninguna dificultad técnica. Incluso a esta altura encontramos restos de tapias de piedra seca construidas para cultivos agrícolas.

Vamos internándonos entre dos paredes rocosas, la gran mole de la derecha es por la que nos alzaremos. El barranco tiene un reducto de pequeñas carrascas, lentiscos, palmitos, acebuches, hiedras, pequeños helechos...

Y cuando tenemos enfrente un muro de piedra el sendero gira bruscamente a la derecha para afrontar el ascenso por el lateral de la peña. En el primer momento hay que tener cuidado por que caminamos por el filo de la cornisa,  pero enseguida se interna en la peña y solo hay esforzarse en ascender. Comienza de nuevo a llover. Parada a poner los chubasqueros y sin prisa pero sin pausa vamos tomando dirección al sendero oficial de subida desde Jesús Pobre o Denia por la Cova de l'Aigua. 

Cuando llegamos al hito de piedras que marca el entronque con el sendero principal apenas llueve, así que decidimos subir hacia arriba, no será nada. Como metereologos no tenemos precio.

A la derecha. Vamos caminando con cuidado con el lapiaz, con las gotas que han caído resbala y al ser tan puntiagudas en un mal paso puedes dejar un tobillo. Así que atentos al suelo progresamos hasta ver el primer cruce hacia la cruz de Denia. Lo desechamos continuando rectos, si aclara volveremos por ahí. La senda se sigue muy bien por las flechas amarillas pintadas en la roca que hay cada pocos metros.

Las vistas hacia la cumbre son nulas. Y las playas de Javea se aprecian parcialmente, apenas se ven las urbanizaciones que tiene bajo sus acantilados.

El día sigue encapotado pero estamos muy cerca, adelante. Llegamos al cruce que viene de la Cruz de Denia, más alto,  pasamos un paso entre piedras y comienza a arreciar la tormenta con tan buena suerte que vemos la cueva al lado del pino en el que solemos comer cuando subimos al Montgó. 

A su resguardo, a esperar a que escampe. Aprovechamos para tomar fruta y barritas, beber agua, sacar unas fotos del riachuelo que se ha formado en un momento y corre por el camino que hemos usado para subir. No todos los días tienes ocasión de ver llover en Alicante, pero después de mas de veinte minutos y algún trueno nos parece que va para largo. Decidimos bajar en cuanto escampe.

Asi que aprovechamos que amaina un poco y regresamos por el mismo camino. El mismo pero tan diferente, con grandes charcos que se han formado entre las picudas piedras kársticas y en algún momento debemos pisar entre ellas, chaf, chaf, que no queríamos hacer un "raid".

Todavía llueve un poco, pero no poder reflejar estas espectaculares imágenes nos empujan a sacar la cámara y disparar al precioso día invernal.(eso si con temperaturas de más de 20º)

Hacia el Norte están las montañas que nos rodean encapotadas, pero un rayo de sol nos ilumina Denia.

Y poco a poco deja de oírse la lluvia sobre nuestros chubasqueros.
Pasamos el cruce de bajada por el barranco de la Hiedra y proseguimos rectos.

Nos situamos en la cabecera del barranco, desde este punto da la impresión de que se puede bajar por el cauce, pero hay una buena pared pétrea que lo impide. 

Y las nieblas bailan al son del viento que sopla con suavidad. El mar y Denia se ven perfectamente iluminados por el sol, pero a su alrededor todo son brumas y neblinas que suben y bajan. Hacia atrás la oscuridad.

Por el Este se abre el telón sobre las primeras filas de montañas y vemos la Segaria, y la sierra de Migdia, con su cúspide del Cavall. 

Llegamos al siguiente enlace, a la izquierda podemos bajar a Denia, antes se pasa por la Cova de l'Aigua. Nosotros continuamos rectos, no llevamos las botas para ningún otro chaparrón.

En este tramo de la etapa se nota que ha llovido menos, la tierra está mojada pero no se han quedado charcos.

Es una delicia bajar por estas laderas, que siempre suelen resultar pesadas por el calor, y en cambio hoy la temperatura es agradable para caminar.

Pasamos al lado de una pequeña explanada que nos brinda unas bonitas panorámicas hacia la cumbre del Montgó. La situación ha cambiado de forma radical, sobre la cima unas pequeñas nubes, pero no son tan negras como hace unas horas.

Y después de una brusca curva a la izquierda encontramos la cova Ampla, la conocemos hace años y hacemos una parada para visitarla. Tiene dos entradas y hacia el fondo se ve una abertura.

Con espectaculares vistas al Mar Mediterráneo hacemos un último giro para situarnos al pie de la cordillera rocosa que llega hasta la cumbre del Montgó.

No sin antes encontrar un cartel indicativo que nos llevaría hacia la derecha al coll des Pous. Desechamos el cruce y rectos caminamos ensimismados con la contemplación de los acantilados pétreos que hay sobre nuestras cabezas, espectacular cresterío, tiene varias oquedades, pero las dimensiones de la peña nos tienen entretenidos durante el descenso.

Llegamos al sendero empedrado, lo cual hace más fácil caminar. Y nos sitúa de frente al Barranco de la Hiedra, que hemos utilizado para ascender.

Y hacia abajo la urbanización en la cual hemos dejado el coche, las neblinas nos permiten ver las siluetas de las cimas que nos rodean, pero muy difuminadas.