PARQUE NATURAL DE LA SIERRA DE ARALAR
FICHA TÉCNICA-
Participantes: Nieves, Chus, Javier, Julián y Lourdes.
Tiempo estimado: 4 horas y media.
Distancia: 14 km. Desnivel de 916 m.
Dificultad: Media-Alta.
GR 12,, SL Gi 2004.(Senda de Allekupe)
Punto de inicio:
Desde el Puerto de Lizarraga dirección a la Barranca. Sobrepasamos los pueblos de Lizarraga y desde Arbizu a Beasain, por el puerto de Lizarrusti, en cuyo alto, paso fronterizo entre Navarra y Guipuzcoa, aparcamos.
Wikiloc: http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=7462693
La ruta son 14 km, la raya recta que se ha añadido no es correcta.
Esta es la correcta. http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=8651403
Esta es la correcta. http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=8651403
ITINERARIO:
Alto de Lizarrusti - Putxerri - Pasadizo en la roca - GR 12 - Fuente de Alleko - Alto de Lizarrusti.
Es un gran macizo kárstico, lo que se traduce en un paisaje rocoso de lapiaz, valles ciegos, colinas y multitud de simas y cuevas. A la vez, es un paisaje de praderas verdes y hayas que cambian de color en cada estación. Es una de las más importantes estaciones dolménicas y también un foco de excursiones montañeras y senderistas.
Destaca la existencia en la sierra del santuario de San Miguel de Aralar (San Miguel in Excelsis), donde se encuentra el llamado Ángel de Aralar.
Los picos más significativos son Irumugarrieta (1.431 m), Aldaon (1.411 m) Ganbo (1.402 m), Pardarri (1.393 m), Beoain (1.359 m), Txindoki o Larrunarri (1.346 m), Artxueta (1.343 m), Arrubi (1.299 m), Putterri o Putxerri o roca de los buitres (1.299 m) y Balerdi (1.195 m).
RUTA:
Comenzamos en el alto de Lizarrusti, junto al centro de interpretación del Parque Natural de Aralar y límite provincial entre Navarra y Guipuzcoa.
Avanzamos unos metros más, sobrepasando la antigua fabrica de Elkorri, situada en una marcada curva, y andando unos 200 metros encontramos la ancha pista a nuestra izquierda. Abandonamos el asfalto y vemos unos hitos de piedra que seguimos, subiendo por el camino que va ganando altura. Casi toda este ascenso es por la divisoria entre Navarra y Guipuzcoa.
Por un precioso bosque de hayas, en sentido ascendente, vamos por la pista que no abandonaremos hasta llegar a un portillo metálico.
Allí el camino se va difuminando aunque lo seguiremos al par de una alambrada que llevaremos a la derecha hasta ir perdiendo la pendiente y llegar a una bifurcación entre la hojarasca.
El camino más claro va hacia la izquierda, en dirección a Igaratza, mirando el mapa desechamos éste y tomamos el de la derecha, que seguirá ascendiendo fuertemente hasta llegar a una zona herbosa, bajo la peña de Putxerri, tapada por el hayedo.
Giramos a la derecha buscando una senda que nos ayude a ascender al Putxerri a través de un precioso paso donde abuncan las rocas, típicas de un paisaje kárstico. Con ayuda de pintura y cairns seguimos la ruta a través de un bosque de pequeñas hayas, situándonos en un momento en la cumbre de piedra de 1.296 metros de altura.
Las vistas desde la cima son grandiosas. hacia la zona del Txindoki en la misma sierra de Aralar, algo más lejana, al Sur, se ven las sierras de Andia y Urbasa, y al Oeste, las de Aizkorri y del Alzania, con el Aratz como cota máxima. Se ven solo las cimas. Abajo un mar de nubes cubre los verdes valles.
Después del almuerzo, descendemos por el mismo paso. Entre las rocas hay un rebaño de ovejas casi al lado de la cima.
Caminamos entre la hojarasca y nos ladeamos a la izquierda. Seguimos las señales de pintura amarilla, y algún cair, hasta llegar a una pequeña explanada entre el hayedo. Aquí tenemos la bifurcación que hemos traído, hemos venido por la izquierda. Ahora continuamos casi rectos siguiendo unos hitos. Encontramos el pasadizo en la roca, del que habíamos oído hablar, pero está algo escondido. Es una bella oquedad en la pared rocosa que sirve de puerta para cruzar al otro lado. ¡Asombroso!
Caminamos entre la hojarasca y nos ladeamos a la izquierda. Seguimos las señales de pintura amarilla, y algún cair, hasta llegar a una pequeña explanada entre el hayedo. Aquí tenemos la bifurcación que hemos traído, hemos venido por la izquierda. Ahora continuamos casi rectos siguiendo unos hitos. Encontramos el pasadizo en la roca, del que habíamos oído hablar, pero está algo escondido. Es una bella oquedad en la pared rocosa que sirve de puerta para cruzar al otro lado. ¡Asombroso!
Desde aquí el sendero desciende para situarnos en una vaguada donde girando a la izquierda descubrimos unas marcas blanca/roca de GR 12 que nos conducirán sin perdida.
La pendiente se suaviza y caminamos por un espectacular hayedo. El camino serpentea para abrirse paso por el bosque, entre hayas, helechos..
En un recodo del camino vemos a lo lejos el embalse de Lareo, por el que hemos pasado otras veces, y las colinas de la vertiente Noroeste de la sierra de Aralar.
Este lugar que parece sacado de un cuento, nos hará recordar otros tiempos ya pasados. Carboneros, pastores, madereros y estraperlistas eran los que andaban por estos caminos aún no hace mucho.
En un recodo del camino vemos a lo lejos el embalse de Lareo, por el que hemos pasado otras veces, y las colinas de la vertiente Noroeste de la sierra de Aralar.
Este lugar que parece sacado de un cuento, nos hará recordar otros tiempos ya pasados. Carboneros, pastores, madereros y estraperlistas eran los que andaban por estos caminos aún no hace mucho.
Después de un largo trayecto bordeamos el monte Alleko por su cara Suroeste.
Es un camino muy cómodo, entre la vegetación frondosa. Siempre junto al vallado siguiendo las marcas rojas y bancas.
Es un camino muy cómodo, entre la vegetación frondosa. Siempre junto al vallado siguiendo las marcas rojas y bancas.
El sendero discurre paralelo a la valla de espino, límite entre Navarra y Guipuzcoa. La alambrada nos acompañará durante casi todo el resto del recorrido.
Pero después de una larga caminata en llano la pendiente se endurece en este tramo, baja en vertical.
Con el desnivel toca clavar los bastones en el sendero que zigzaguea, tomando rumbo Sur. Enseguida llegamos a una zona rocosa, las hayas toman formas diferentes para crecer entre las rocas.
En una pequeña explanada hay a la derecha un poste de madera, sin nombre, es un cruce para acercarnos desde aquí al embalse de Lorea. Lo desechamos continuando rectos.
Por medio de un bosque increíble, que crece entre roquedos, serpenteando, vamos descendiendo bruscamente por un pequeño sendero que nos sitúa en el principio de la ruta, en el alto de Lizarrusti.
Por medio de un bosque increíble, que crece entre roquedos, serpenteando, vamos descendiendo bruscamente por un pequeño sendero que nos sitúa en el principio de la ruta, en el alto de Lizarrusti.
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