Machado

"Caminante, son tus huellas el camino y nada más; Caminante, no hay camino, se hace camino al andar. Al andar se hace el camino, y al volver la vista atrás se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar. Caminante no hay camino sino estelas en la mar". Machado.

domingo, 22 de noviembre de 2015

DE BOLULLA A L'AIXORTÀ (1.218 m.) Y MORRO BLAU (1.125 m.)

POR LOS BARRANCOS NEGRE Y DE LA CANAL


FICHA TÉCNICA-
Día: 22/11/2015
Participantes: José, José Ángel, Isaac, Julián y Lourdes.
Tiempo estimado: 7 horas y 20 minutos.
Distancia: 19 kilómetros.
Dificultad: Media-Alta.
PR CV 49. Senda Vella.

Como llegar: Por la A-7 hasta Benidorm/Callosa d'En Sarriá. Tomar la CV- hasta Callosa y en la rotonda girar hacia las Fonts del Algar y Bolulla. Rectos hasta llegar al pueblo de Bolulla, a su derecha hay un aparcamiento.
Wikiloc: http://es.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=11473080

ITINERARIO:
Bolulla- PR CV 49 - Font del Rondant - Blanquinal - Cruce al Barranc Negre - Foia Pla - Foia Sellés - Barranc Negre - Morro Blau - Aixortà - Font y refugio del Teix - Corrales del Sacanyar - Collado de la Canal - Barranco de la Canal - Collado del Castellet - PR CV 49 - Blanquinal - Font del Rondant - Bolulla.



La sierra de Aixortá está situada al Norte de Alicante, entre la Marina Alta, la Marina Baja y el Comtat. Forma parte de una alineación montañosa con la Serrella. Rodeada por los municipios de Bolulla, Guadalest, Tárbena, Benimantell, Beniardá y Castell de Castells.







Por el Este se encuentra separada de la sierra de Bernia por las fuentes del Algar. Por el Oeste, se alinea con un conjunto de montañas en la Serrella. Su máxima elevación es la Penya Alta o Aixortà, con 1.218 metros.


RUTA:
Aparcamos en Bolulla, sin entrar al pueblo a su derecha hay un aparcamiento. Cruzamos la carretera, CV-715, para introducirnos por las calles de la localidad alicantina girando hacia la derecha. Pasamos al lado del Bar la Era.
Enseguida hacemos un cruce a la izquierda para adentrarnos por un estrecho carretil embreado que transcurre rodeado a ambas partes de huertos con árboles de toda clase:nísperos, almendros, nogales, higueras, naranjos, mandarinos, limoneros.......
Este tramo es parte de la Senda Vella que unía Callosa d'Ensarría con Castells de Castell, también llamada "del correuer", debido a que a principios de siglo se utilizaba para traer el correo entre ambos pueblos.
Pero a pesar de ser trayecto del PR CV 49 no está marcado con pintura blanca/amarilla. En algún punto encontramos alguna marca difuminada, pero no las necesarias para seguir el camino sin dificultades. Un GPS es necesario para avanzar en este tramo.
Vamos dejando atrás las huertas y cuando encontramos un par de enormes hitos de piedra debemos pasar entre ellos y bajar al cauce. Por esta vereda es fácil de caminar, hasta que encontramos que la maleza se ha apoderado del cauce por las lluvias y la falta de limpieza. Asi que nos toca subir unas tapias laterales, alzarnos sobre el camino cerrado y avanzar hasta encontrar de nuevo el rastro. En esta parte, el trayecto es una preciosa senda de herradura de escaleras de piedra antiguas.
Vamos por un estrecho sendero, al borde del riu de Bolulla, que forma un profundo barranco a nuestra derecha.  Sorprendentemente, se abre la vista, a la derecha, a unas colosales paredes de piedra que unen la Peña del Castellet y la Peña de Tárbena con el Pas Tancat, en su parte trasera. Una parada para disfrutar de este rincón y proseguimos hasta llegar a la carretera. 

Giro a la izquierda, para ascender por ella apenas 200 metros, y, en el primer cruce, a la izquierda, volvemos a virar. Vamos a subir a l'Aixortà por el Barranc Negre y bajar por el Barranc de la Canal.
Cruzamos por un carretil el Barranc Negre, vemos que hacia arriba el cauce rocoso baja seco, pero cuando llueva mucho imaginamos que rebasará la carretera.
Después de bajar hasta el cauce la pista se transforma en camino de tierra que en constante ascenso nos va alzando con vistas fabulosas de la Penya de Tárbena, Bernia, la costa de Altea y las huertas de Callosa d'Ensarria y Bolulla en las que predomina el color verde y el brillante blanco de los plásticos de los invernaderos.
Sin mucho esfuerzo nos alzamos sobre la vertiente Norte de la Peña l'Or, que se queda a nuestras espaldas. En otros recorridos la hemos bordeado por su cara Oeste y Sur.
Salimos al sendero situado en la Foia Pla, que viene desde Callosa d'En Sarriá, por el barranco de les Pomeretes. 
Tomando hacia la derecha,  dejamos a la diestra un corral en ruinas en la zona de la Foia Pla. Enseguida nos internamos por un atajo entre las antiguas terrazas con tapias de piedra. No queda ni un solo cultivo en ellas.
Después de un rato volvemos a enlazar con el sendero oficial, saliendo desde el atajo, para continuar en suave ascenso.
Hacia delante vemos la parte alta de la sierra y una cueva que se ha formado en ella.
Hacia atrás las vistas se abren al Mar Mediterráneo y a la costa de Altea, a la izquierda, surge la Sierra del Ferrer y la de Bernia. Enmedio de ellas sabemos que está el Paso dels Bandolers. Desde aqui se aprecia el Barranco del Curt, por sus tonos verdosos en medio de la piedra,  que se abre una vez traspasado el angosto y abrupto paso.  
A la derecha, tenemos la Almedia, el Frare, el Morro Blanc.
Continuamos hasta un rellano y por fin divisamos el tramo del Barranc Negre que tenemos que ascender. La primera impresión es de estar a miles de kilómetros de Alicante, en mitad del Pirineo. 
El acantilado, con colosales peñas, marca el lateral infranqueable. Enmedio de las dos formaciones pétreas, una loma herbosa que es el camino a superar.
Avanzamos por la sinuosa senda que va por el lateral del barranco dirigiéndonos hacia las enormes paredes de la izquierda. La vegetación está compuesta de matorral bajo, en su mayor parte de aliagas, brezos, helechos con tonos ocres.
Una vez a resguardo del viento hacemos una parada para almorzar y recuperar fuerzas para ascender el barranco.
Ahora tenemos a la vista el Bernia y la afilada cuchilla del Ferrer, que desde aquí no parece tanto, pero, como tuvimos ocasión de comprobar, es una afilada crestera.
Retomamos la marcha, la senda tiene en este momento un gran desnivel pero poco a poco vamos remontando la pendiente y superando el tramo más vertical.

Transitamos encajonados entre las dos peñas, por camino de tierra herboso cuya única dificultad es la cuesta tan vertical que hay que afrontar. A la izquierda, en lo hondo del barranco y al resguardo del cantil, hay varios arces con tonos otoñales.
El sendero se desvía poco a poco a la derecha para situarse debajo de los cantiles del Tossal dels Parats.
Y llegamos a una pequeña pedrera. 
En este punto se puede ir a la derecha, para llegar al collado, salvarlo sin ninguna dificultad, porque es un sendero herboso, y  desde ahí dirigirse hacia el Racó Roig o la Xortá por su cara Norte. 

Nosotros proseguimos por donde nos marcan los hitos de piedra, de frente.
Primero caminamos con vegetación baja, pero vemos a nuestro alcance un pequeño bosque de pinos.
Disminuye el desnivel, dejamos atrás los riscos más altos y las vistas a nuestras espaldas son hacia el mar y sobre todo la sierra del Ferrer y el pueblo de Tárbena sobre una meseta. Espectacular.
Hacia adelante tenemos la visión de dos espolones rocosos  a nuestra izquierda, y a la derecha, un cantil macizo con un sester en sus paredes.

Varias paraetas para contemplar el paisaje embriagador y sacar fotos.

El camino va entre varios ejemplares de carrascas, pinos y poco a poco nos lleva hasta el cruce donde un coche desvencijado marca el punto de inicio/final de este espectacular barranco.
Enlazamos con la pista de tierra, PR CV 150 que viene desde Castell de Castells, o el PR CV 18  que viene desde Guadalest; e incluso el PR CV 151 que desde Els Arcs te puede traer hasta este punto.
Nosotros tomamos a la izquierda y con unas panorámicas espléndidas de toda la Marina Baja, parte de la Alta y de los barrancos detrás de Tárbena nos dirigimos hacia la cima. Descubrimos que se asoma el Montgó, emerge del mar con su forma característica de proa de navío varado en tierra. Parece que se aprecia hasta los tonos del último incendio.
Vamos caminando haciendo un giro brusco a la derecha, desde el que se acentúa el desnivel, y se abren más las vistas a la bahía de Altea, de Benidorm.... 
De frente surge la caseta del Morro Blau y la peña rocosa que forma la cota máxima de esta sierra, la Xortà o Penya Alta.
Solo nos resta un último esfuerzo para hacer cumbre en el vértice geodésico del Morro Blau.
Desde detrás del puesto de vigilancia se contempla todo el cordal de Aitana, con el Ponoch y Puig Campana, que caen hasta el valle. A continuación, vemos el perfil de los rascacielos de Benidorm, la sierra Helada, la playa de Altea, Bernia, Sierra del Ferrer, Puig de la Llorença, el Montgó...... Todo el Este de Alicante. Una atalaya impresionante.

Un alto para disfrutar de las vistas y para sacar fotos de nuestro alrededor y al lado del vértice geodésico. 
Cuando salimos del resguardo de la caseta de vigilancia se nota el viento. Hoy está de cambio y sopla más fresco. Así que las últimas fotos hay que hacerlas un poco más rápidas.




Proseguimos por la pista ancha de tierra viendo a nuestro costado el Cerro dels Parats y, a continuación, la Penya Alta o l'Aixortà,  que es el próximo objetivo.
Abandonamos la pista cuando nos situamos enfrente del collado que separa ambas peñas y atajamos, haciendo un campo a través de forma sencilla,  hasta las fincas que hay en la pequeña vaguada. Desde aquí subimos zigzagueando hasta el collado. Ya vemos marcas de PR y, girando a la izquierda, nos disponemos a remontar la última parte de nuestra ruta. Es una subida sencilla, marcada con pintura y algún hito que nos encumbra a l'Aixortà.
El día esta fabuloso, hay mucha visibilidad asi que a las sierras que dominabamos anteriormente se suman la Serrella en toda su longitud, el Cocoll, la Safor y, hasta Valencia, con el Montduver y la costa.
Parece que sopla menos el viento, pero nos decidimos por bajar a comer a la fuente.  Destrepamos despacio y con cuidado porque el tipo de piedra algo puntiaguda te obliga a mirar bien donde pisas. Pasamos al lado de dos formaciones de carrascas y llegamos de nuevo al collado. Giro a la izquierda y con vistas a las paredes del Cerro dels Parats vamos descendiendo en suaves zigzags hasta adentrarnos en un pequeño bosquete de pino y carrasca que nos sitúa en el refugio y Font del Teix o dels Teixos. ( todo el mundo le llama dels Teixos, pero el cartel pone el Teix)
Dudamos si comer dentro de la casa de madera o fuera pero desplegamos la comida fuera. Hay un par de 4x4 que han llegado hasta la puerta de la cabaña. No se molestan casi ni en bajar del coche.
Pero un par de soplos de viento después decidimos entrar al resguardo y comer más calentitos. El sitio es perfecto, con una enorme mesa de madera y protegidos del viento y el sombrío de la cara Sur de l'Aixortà.
Retomamos la ruta desde la puerta principal de la cabaña salimos rectos y cuando tomamos una cierta distancia observamos una fabulosa vista de la Penya Alta. Inmensa roca que hemos ascendido sin ninguna dificultad técnica y que desde esta perspectiva tiene unas dimensiones colosales.
Proseguimos. En el primer cruce vamos a la derecha por la pista de tierra y avanzamos casi hasta el desvío por el que hemos remontado el Barranco Negre, donde estaba el coche abandonado, pero unos 300 metros antes un hito de piedra y el track nos conducen hacia la izquierda. 
Caminamos casi por el borde del acantilado del Tossal dels Parats que caía sobre el Barranc Negre, cerrando por la derecha la rambla.  Pero si no te asomas para comprobarlo la sensación es de un sendero llano. Impresionante.  
Enseguida éste se convierte en una angosta senda. Va dirigiéndose hito a hito a la izquierda para descabalgarnos desde la loma del Tossal dels Parats hasta el Pla del Sacanyar. Vemos en todo momento el perfil Noreste de la cima de l'Aixortà, rocoso y altivo. 
Y llegamos al Pla del Sacanyar. Unas fincas donde ha nacido la hierba verde que atravesamos en dirección a los corrales del Sacanyar, y resto de los corrales que se situaban al resguardo de la Xortà. Apenas unas paredes se mantienen en pie.
Siguiendo las fitas de piedra llegamos a una vaguada que sirve de confluencia de varios itinerarios. Si nos dirigimos a la izquierda, cruzando el barranco del Sacanyar y del Xarquet, enlazaríamos con la pista de tierra que desde el Pla d'Aialt sube a la Xortá, a Els Arcs, a Castell de Castells o a Guadalest.
Nosotros vamos a la derecha por Arcs y  la cabecera del barranco de la Canal. Eso si, debemos hacer una parada para quitarnos la ropa antes de seguir el itinerario.
Esta es una senda muy sencilla, tanto de bajada como de subida. Es un placer caminar por ella.  
Descendemos poco a poco , atravesamos restos de casas de campo que el tiempo ha ido desmoronando. Comentamos el sitio tan idílico para vivir con un par de animales, en medio de la naturaleza. El invierno y la falta de comunicación con coche han postergado esta zona a paso de montañeros y cazadores.

La vereda va paralela a las peñas de la Sierra del  Racó Roig, por la falda de su cara Sur, y acaba de forma abrupta en el collado del Castellet.
A continuación, surge la Penya del Castellet, que ya tenemos a la vista. Una sierra no muy elevada pero con abruptos acantilados. Sobre ella se conservan las ruinas del Castell de Garx. Apenas unas paredes con restos de torreones que  nos hablan del sitio estratégico entre Castell de Castells y Bolulla y con un dominio visual que en días despejados permiten ver hasta Ibiza.

Vemos a lo lejos un gran grupo que está desplegado en su loma descansando.
Y caminamos embelesados con las panorámicas hacia adelante y girándonos nos despedimos de la cumbre rocosa de la Xortá.
La senda que traemos es tan estrecha que debemos caminar en fila india. Desde el Collado del Castellet vemos la tapia de piedra que tuvieron que levantar para hacer en esta agreste sierra, con enormes barrancos,  una vereda tan llana que parece un paseo por un jardín.
Esta senda nos enlaza con el collado del Castellet. Aquí volvemos al PR CV 49 que va de Callosa d'Ensarrià a Castell de Castells. Iríamos hasta este último pueblo si nos dirigiéramos a la izquierda.


Nosotros tomamos la dirección diestra para caminar por la falda de la Penya del Castellet.
Pensamos en la posibilidad de subir al Castillo de Garx, pero la piedra afilada y que no tenemos claro el sendero nos hacen dejarlo para otro día.
Pasamos al lado de una casa de piedra. Un maravilloso enclave para descansar del bullicio de la ciudad. Pero tanta tranquilidad debe agobiar. Un cartel de "se vende" colocado en la tapia nos hace pensar que no es tan fácil vivir aislados del mundo.

Salimos a una pista embreada por la que caminamos unos metros. En la primera curva, a la derecha, un cairn nos indica, a la izquierda,  el atajo por las huertas de almendros, olivos, algarrobos que nos conducen de nuevo al carretil. 
De nuevo un hito de piedras a la derecha nos sacan del asfalto para caminar por un estrecho sendero que nos lleva hasta la carretera.
Estampas irrepetibles de este descenso, que nos hacen preguntarnos cómo se puede pasar mejor un domingo de noviembre. Sin duda, perdidos por caminos de nuestras sierras.

Unos pocos metros y en el hito de piedras, a la derecha. Debemos girar para internarnos en la senda de pinos que ya hemos recorrido a la mañana. Vamos pensando como pasar el tramo del cauce cerrado con la maleza y cuando llegamos hasta él vemos que hay unas huellas que parece que se encaminan de frente. Subimos la tapia de un huerto de naranjos y girando hacia la izquierda llegamos al punto en el que dos cairns de piedra nos han llevado al cauce del barranco Negre.
Solo nos queda caminar entre las huertas  viendo la Peña l'Or, a la derecha, y más adelante, el perfil afilado de toda la sierra de Bernia.  
Vamos los últimos metros entre las huertas que hemos recorrido por la mañana. Nísperos, nogales, higueras, naranjos, limoneros....hacen de este valle un vergel.
El pueblo está en las sombras, pero sobre Bernia todavía inciden los rayos del sol.
Magnífica excursión en cuanto a kilómetros y dificultad. Espero que nuestros "invitados" hayan disfrutado lo mismo que nosotros y dentro de poco haya otra ruta con una sierra tan nueva y espectacular.

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