Machado

"Caminante, son tus huellas el camino y nada más; Caminante, no hay camino, se hace camino al andar. Al andar se hace el camino, y al volver la vista atrás se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar. Caminante no hay camino sino estelas en la mar". Machado.

miércoles, 14 de febrero de 2018

AITANA POR LA CARA NORTE

NIEVE EN AITANA


FICHA TÉCNICA-
Día: 14/02/2018.
Participantes: Julián y Lourdes.
Tiempo estimado: 5 horas.
Distancia: 11 km.
Desnivel: 740↑↓
Dificultad: Media-Alta. Por el desnivel acumulado y la exigencia de la subida por la pedrera vertical. Sin dificultad técnica.
Como llegar: Por la autovía para tomar la autopista hasta Benidorm/Callosa d'en Sarria. En la rotonda 1 giro hacia Benimantell y desde el pueblo a Benifato. Un estrecho carretil nos lleva a la Font de Partagat.
ITINERARIO: 
Camino Partagat - Font de Partagat - Font de la Hiedra - Sendero Botánico - Pou de la Neu dels Teixos - Runar dels Teixos - Collado y Alto de Tagarina - Penya Alta - Simas de Partagat - Aitana - Paso de la Pedrera de la Font Forata - Sester - Font de la Forata - Pou de la Neu de la Forata - Depósito de agua contra incendios - Bancal de Vidal - Corral de Bernal - Corral de Barbarroja - Barranco de Barbarroja - Barranco de Alfafara - PR CV 20 y 21 - Font de Partagat - Camino Partagat.


RUTA:

Subimos por la carretera viendo barandillas y un sendero que han rehabilitado hace poco, aparcamos y recorremos un pequeño tramo del Camino Partagat, solo para peatones.



No pudimos venir la semana pasada y a pesar de que solo se ven unos borrones blancos por las cumbres nos acercamos a Aitana para disfrutar de la poca nieve que quede.





















Es todo un espectáculo llegar al rincón de la Font de Partagat. Contemplar su aspecto invernal, al resguardo de la Penya Alta y el Penyó Rapel.
Desde esta subimos casi rectos a la Font de la Hiedra.


Y por el lateral de un bancal de almendros
ascendemos con la mirada puesta en la hipnótica Penya Alta, en su ladera se conservan unos rodales de nieve.
Enlazamos con el Sendero Botánico, PR CV 20 y 21, y tomamos hacia la izquierda. En pocos metros giro a la derecha para caminar por la pista de tierra hacia el collado de Tagarina.

























Detrás del collado y del Peñón Mulero se puede ver toda la cresta afilada del Bernia.























Un cruce señalizado, a la derecha, nos lleva por una corta cuesta hasta el pou de la neu dels Teixos. Desde el marco incomparable de este vestigio que nos da una idea de la forma de subsistencia de los habitantes de esta zona hace medio siglo podemos ver la Serrella, la Xortá, Bernia...


A nuestra espalda los paredones de la sierra de Aitana.

Y en este punto giramos a la derecha para afrontar la subida por el Runar dels Teixos. Por el lado de la casa en ruinas, dels nevaters.










Por un sendero visible en principio y que luego afrontamos casi rectos nos situamos debajo de los contrafuertes de la cara Norte de Aitana. Es un bancal de almendros que todavía no han sacado la flor.




























                                                           Sorteando unas colosales y afiladas peñascos que tenemos justo encima, nos dirigimos a la izquierda, hacia una peña picuda o frare que luce solitaria en medio de la inmensa pedrera. Hay que caminar con cuidado para no irse hacia abajo, es un esfuerzo titánico.
Como recompensa pisamos de nuevo nieve.
Pero en perpendicular conseguimos llegar a la peña aislada.
























Entre el pináculo que veíamos en el avance y otra pequeña peña se abre un ventanal al embalse de Guadalest, y al cordal de la Xortà.























Pensábamos que habíamos superado la parte más difícil del ascenso, craso error.
Ahora viene el tramo más exigente, casi en vertical.
Si no es en pequeños zigzags nos vemos mal para avanzar. La pisada no debe ser muy fuerte para no irte hacia abajo, ni demasiado floja que no te permita subir. Y como en muchas ocasiones los bastones son imprescindibles para conseguirlo.

Nos acercamos a la peña de Tagarina, debemos desviarnos a la derecha para atravesar un paso rocoso en el que se ha quedado un reducto de nieve blanda, hundimos las botas, bastones y adelante. Un último tramo de roca suelta y ya nos encaramamos al cordal de la sierra de Aitana. Hacía atrás todo el valle de Guadalest.

Una mirada hacia la derecha, destaca la abrupta Penya Alta.
























Otra foto a nuestra salida del Runar dels Teixos. Hace unos años estábamos comiendo en este mismo punto cuando un muchacho se lanzó hacia abajo por el lateral del Alto de Tagarina.
Aprovechamos a beber y tomar algo en este mirador. No nos olvidemos al Este surge la visión del colosal Puig Campana, con su tajo es reconocible desde muy lejos.
Hacia el Sureste en primer término el Peñón Diví, la sierra de Sella, al fondo el Cabeço d'Or y toda la línea marítima.

























Tomamos rumbo a la derecha, por el cordal con vistas a las vertiginosas caídas de los peñascos macizos, de una pieza.

Una parada en el montón de piedras que señalan la cumbre de Penya Alta, más de 1.500 metros de altitud, situada en las descarnadas paredes rocosas de Aitana.
Disponemos de panorámicas a Aitana y las simas de Partagat.
Seguimos en descenso hasta llegar al collado de las simas de Partagas. Aquí tomamos el ramal de la izquierda para ir a la cumbre. No sin antes sacar una foto de la Penya Forata. Al echar una mirada hacia atrás vemos el itinerario recorrido desde Penya Alta y a la izquierda descubrimos el imponente Puig Campana.

Vamos tan entretenidos charlando, sacando fotos y disfrutando del entorno que no nos fijamos y nos pasamos la cima. Hay que regresar hasta la cumbre pisable de Aitana, llamada por muchos Aitaneta.

La foto de cima de rigor y contemplamos que al resguardo de la cumbre de Aitana se conserva nieve, entre la pinada al Norte. Reemprendemos la marcha con ilusión.















Y regresamos al lado del vallado de los militares, un hito de piedras y una señal blanca/amarilla nos señala el camino de descenso por la pedrera de la Font de la Forata. A la derecha.

Por la bajada pedregosa hay poca nieve y blanda. En el bosque de pinos queda un rodal de nieve.


Después de 2 semanas desde la primera nevada nos han guardado un poco, algo apisonada, por lo que vamos caminando por el lateral de la senda oficial para no resbalar.














Que gozada, se encuentra en su punto. No demasiado helada como el año pasado que teníamos idea de subir por esta ruta, pero una capa de hielo nos hizo desistir.
Y vamos descendiendo de Aitana con este paisaje invernal, la temperatura también es ideal. 

























Vemos la roca/sester en la que ya hemos almorzado otras veces y dada la hora entramos a su resguardo a comer. 
No nos habíamos dado cuenta pero teníamos hambre. Una vez descansado y repuesto fuerzas continuamos.
Al lado tenemos la preciosa fuente de la Forata, con sus alineadas y escalonadas pozas. Y paramos un rato a contemplar el panorama, hacia la izquierda la sierra de Mariola, se han conservado unos neveros en la loma del Montcabrer, enfrente la Serrella, quedan restos en Pla de la Casa y en la Mallá del Llop, menos en la Xortà...


Hacia atrás vemos la imponente imagen de la Penya Forata, con su casi perfecto círculo horadado en mitad del peñasco.
Nos despedimos del cordal de Aitana y con giro brusco a la izquierda tomamos el camino hacia la Font del Arbre.
Pero apenas unos metros. Enseguida un cruce medio tapado con la nieve, pone una señal de prohibido y nos desvía a la derecha.


Una vez por la senda nos pasa lo mismo que el año pasado hay mucha nieve y no está pisada, a disfrutar.



Pero poco a poco la nieve va desapareciendo y solo queda en los sombríos de los caminos.

























Se ven los campos rojizos, recién labrados.


Y llegamos a la bifurcación. Para ir hacia Machelis y castillo de Confrides rectos. Nosotros nos dirigimos a la derecha por un precioso túnel de árboles que nos sitúan en los bancales de Vidal, también arados.












En un lateral, a la izquierda, se encuentran los restos de una gran masía, creemos que será el famoso Corral de Bernal que sale en todos los mapas.
















Pasamos al lado de un corral pequeño en ruinas, le llamamos el Corral de Barbarroja, porque enseguida la pista de tierra nos lleva a atravesar el Barranco de Barbarroja.
De frente disfrutamos del cordal de la Penyó Rapel.

























Llegamos a un cruce por el que podemos subir a la derecha a la Font del Nouer, seguimos hacia la izquierda. Una nueva bifurcación, señalada con pintura azul, nos lleva por la derecha para continuar nuestro sendero hacia la cabecera del Barranco de Alfafara.
Vemos el lateral de las enormes Moles, detrás de ellas está el castillo de Confrides o Aljofra.

















Y salimos al cruce. A la izquierda hacia el Penyó Rapel. Lo desechamos dirigiéndonos a la derecha para encontrar el sendero oficial del PR CV 20 y 21. Lo tomamos dirección a Benifato, a la izquierda.
Estamos en la zona que llamamos de paisaje lunar, grandes rocas esparcidas por el suelo como si hubieran sido lanzadas desde la Penya Alta.

Disfrutamos de panorámicas del valle de Guadalest y la Xortà.

























Hacia el Este podemos ver Bernia e incluso el peñón de Ifach, con Tagarina en primer plano.

























A nuestra izquierda van surgiendo los roquedos del Penyó Rapel.
























Y llegando al cruce de la mañana giro a la izquierda por una estrecha senda, para no dar un rodeo por la pista de tierra. Que nos saca de nuevo a la Font de Partagat.

























Bajamos hasta el coche poniendo punto y final a un día extraordinario. Hemos vuelto a pisar nieve, y eso que no teníamos muchas esperanzas. Y nos despide una postal de primavera con los almendros en flor.

























Regresamos por el valle de Guadalest haciendo una parada ante semejante belleza.

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