Machado

"Caminante, son tus huellas el camino y nada más; Caminante, no hay camino, se hace camino al andar. Al andar se hace el camino, y al volver la vista atrás se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar. Caminante no hay camino sino estelas en la mar". Machado.

martes, 28 de diciembre de 2010

LA PLANA (1.338 m.), en la SIERRA DE CODÉS...


... GUILLIMONA Y TRESVISO


FICHA TÉCNICA-
Día: 28 de diciembre
Integrantes: Maite, Nieves, Lourdes y Julián
Tiempo estimado: 4 horas.
Inicio de la ruta, muy cerca de Otiñano.

RUTA:
En mitad de bosque.
Parte de la localidad Navarra de Otiñano, en el Valle de la Berrueza, a cuya espalda yerguen imponentes las agujas calcáreas del Malpica y el cordal que los une con la cumbre de La Plana o Monte de Navarra. Desde Otiñano, la Malpica se muestra amenazadora e inaccesible, aunque luego comprobamos que no es así. Su estribación más occidental está formada por un notable cabezón rocoso. Esta cima se conoce como la Peña de la Concepción. Por detrás de la iglesia de San Martín existe una amplia pista de tierra por la que vamos en coche hasta que la nieve y el hielo lo permiten, en ese punto aparcamos. El paisaje es impresionante, todo esta cubierto por la nieve y estamos rodeados de encinas. 
La Sierra de Nazar al fondo y el Valle de la Berrueza.
A los pocos minutos, ya caminando, nos encontramos con una encrucijada de caminos. Uno va recto hacia el cordal de San Cristobal y Punta Redonda, por el que regresaremos; otro enmedio parece dirigirse al cordal que va de Malpica a La Plana; y el tercero, que es el que tomamos, se va a la izquierda y pasa por debajo de las citadas agujas de Malpica.
Cresteando con La Plana al fondo.
Es una pista ancha de tierra que antes de llegar a la carretera que une Otiñano en el Santuario de Codés, giramos hacia la derecha por el camino que va paralelo a la citada vía de comunicación. Así, con rumbo ligeramente suroeste, el ancho camino se abre paso entre encinas, quejigos y boj hasta llegar a una construcción abandonada. El camino continúa hasta el Santuario de Codés, pero nosotros lo abandonamos en este lugar girando 180 grados a la derecha, frente a la puerta de entrada, para continuar en suave ascenso hasta que gira de nuevo 180 grados, ahora a la izquierda, y llega el momento de abandonarlo. 
Una bonita imagen de la zona.
En una fuerte curva, un hito de piedras indica la entrada al sendero que se dirige directo a las peñas, por las pedrizas de su base sur. Con especial atención y ayudados por los cairns ( hitos) y alguna cinta, trepamos por una fácil canal hasta  una especie de collado. Estamos ya bajo los monolitos calcáreos que singularizan esta montaña, la Malpica, y a la derecha se aprecia claramente la pequeña cruz instalada en la cota oriental o Peña de la Concepción que, con sus 1.089 m. de altitud, no es la más elevada del conjunto, aunque sí la más accesible. A su lado se alzan las torres Central, de 1.096 m., y Occidental que, con sus 1.110  m., es el punto más elevado. 
El Santuario de Codés abajo.
A la vez que viajamos con la vista lo hacemos con las leyendas que van unidas a estas sierras,  para remontarnos a principios del siglo XVI, cuando Juan Lobo y sus seguidores se refugiaban en estos peñascos, tras sembrar el terror con sus fechorías en los pueblos del valle. Al fin, el caballero Pierres de Mirafuentes le dio muerte un día de San Juan de 1523. En la actualidad, aún se celebra el acontecimiento en Torralba del Río, lo que da cuenta de la importancia de este capítulo de la historia. Nosotros no llegamos a esa zona, porque ya la subimos el pasado año.
En la cima de La Plana con el Ioar al fondo.
En medio de un bosque de hayas.
Seguimos de frente, dejando a nuestra derecha el tronco de una gran encina cortada hace tiempo y que nos sirve de asiento para realizar un pequeño descanso. Por un vago sendero, cubierto de nieve, salimos al collado occidental de Malpica, donde comienza el largo espolón, tapizado por un extenso brezal, que nos lleva a la cima de La Plana guiados por puntos azules de señalización, aunque en ningún momento abandona la línea de cresta. En la cumbre, también llamada Monte de Navarra, encontramos dos buzones montañeros que invitan a descansar junto a ellos y disfrutar de la panorámica, característica constante de la travesía. Hacia el oeste, a tan sólo 1.300 metros en línea recta, se alza el gran repetidor del monte Ioar, pero nosotros  descendemos por la senda hacia la cara norte, primero cresteamos y luego se introduce en el hayedo y finalmente sale al collado de La Plana por donde discurre el camino que viene del Santuario de Codés, señalizado como GR-1, y que lleva a Santa Cruz de Campezo. 
Saliendo del barranco.
Giramos hacia la derecha y en vez de coger el camino que nos llevaría al puerto de Nazar descendemos por un barranco que en su primera parte está bastante limpio, pero que luego va cerrando la vegetación.  (Teniamos que haber esperado un poco más, en vez de lanzarnos por el barranco seguir hasta la loma siguiente donde hay un pequeño sendero pisado)
Nos cuesta llegar al camino que nos llevará hasta el coche, porque el fondo del barranco acumula mucha maleza y tenemos que ir campo a través girándonos hacia la izquierda hasta encontrar la pista que al final logramos enlazar. La ruta resulta preciosa y la nieve todavía lo hace más atractivo.






Los últimos kilómetros de la ruta.   















PD. Patro, Vicente, Antonio y José aprovecharon la Navidad para ir a la Guillimona. El Gps funcionó a medias, pero lo pasaron fenomenal, mientras que José Ramón, Yolanda y familia (Ismael y Alicia) estuvieron en el paraíso de Tresviso.
Yolanda y José Ramón en Tresviso.
La ruta comienza en el desfiladero de la Hermida, junto a la central eléctrica del río Urdón, a quinientos metros se cruza el río por un puente y, desde ese momento se incia el ascenso, sin ningún descanso, hasta el mismo pueblo (Las dos fotos son preciosas). Haciendo montaña los turrones se asimilan mejor.

Menuda postal navideña en Tresviso.


No hay comentarios:

Publicar un comentario