ENTRE IMPRESIONANTES BARRANCOS.
FICHA TÉCNICA-
PARTICIPANTES: Lourdes y Julián.
DISTANCIA: 17 km
DESNIVEL: 722 m. (Desde los 314 del pueblo, hasta la cota más alta, el Cocoll, de 1.048m.)
DIFICULTAD: Media.
El bonito pueblo de Benigembla enclavado en la Vall de Pop será a donde llegaremos con coche, aparcando en las afueras dirección a Castell de Castells, para acto seguido empezar el paseo.
Por un camino asfaltado a nuestra izquierda, con un panel que señala hacia el Corral Nou.
Empezaremos a andar por un camino ancho, por donde remontamos hasta llegar a una masía derruida, y con una curva a la derecha se convierte en senda, teniendo que ir con cuidado con las chumberas. Precioso sendero antiguo y muy bien señalizado como PRV, sin número.
Dejando varios corrales en ruinas nos iremos adentrando en plena sierra llegando al poco de caminar a un aljibe conocido como la Aljup del Frare.
Dejando varios corrales en ruinas nos iremos adentrando en plena sierra llegando al poco de caminar a un aljibe conocido como la Aljup del Frare.
Curioso aljibe de donde mana agua, que está situado debajo del camino, bajo nuestros pies. Se accede a él por unas rústicos escalones de piedra sobresaliendo en la pared, que nos hace recordar a los antiguos agricultores de la zona bajando a cuidar sus huertos. Sistema infalible, después de los años todavía sigue en pie.
Ascendemos en continuas curvas que hacen sencilla la visita a este barranco del Bou y rodeados de bancales donde todavía se conserva algún olivo, almendros, más adelante sobrepasamos una zona con alguna carrasca y algún pino que hacen nuestra ruta más fresca.
Tomando altura, vigilados en todo momento por el Cocoll, subimos hasta el corral de la Malea en ruinas, con una maravillosa era presidida por dos impresionantes almendros que se mantienen erguidos y pequeña higuera que comienza a brotar, haremos una parada para sacar unas fotos, es un mirador natural: hacia arriba, el Cocoll; hacia abajo, el Cavall Verd (fotos).
Tomando altura, vigilados en todo momento por el Cocoll, subimos hasta el corral de la Malea en ruinas, con una maravillosa era presidida por dos impresionantes almendros que se mantienen erguidos y pequeña higuera que comienza a brotar, haremos una parada para sacar unas fotos, es un mirador natural: hacia arriba, el Cocoll; hacia abajo, el Cavall Verd (fotos).
Solo nos queda cruzar el aeródromo y por detrás de las casas coger la pista asfaltada que nos lleva en diez minutos al punto geodésico y a la caseta de vigilancia donde nos sentiremos sobrecogidos por las escarpadas peñas y el barranco de Galistero que por detrás del hito tienen una caída libre, de vértigo.
Almorzamos un poco disfrutando las espectaculares vistas que desde aquí tenemos hacia todos los ángulos de Alicante: La Serrella, la Peña del Castellet, La Aixorta, Bernia, el Castell de la Solana, La Segaria, Cavall Verd, Sierra de Alfaro.
Exultantes por la excelente visión desandamos lo andado por la pista forestal descendiendo por detrás de la casa de vigilancia hasta llegar al aeródromo, en vez de coger el sendero recorrido de subida por el Barranco del Bou, nos vamos a buscar el Barranco de Almadic. Por el sendero por el que hemos venido siempre desde el Coll de Rates, así que cruzamos la pista de aterrizaje más al sur, y girando a la derecha hasta pasar 2 pinos, uno está torcido y a punto de caer una gran rama y desde allí llegamos hasta un raso donde se encuentran las ruinas de una casa y unas bañeras para dar de beber a los animales.
Exultantes por la excelente visión desandamos lo andado por la pista forestal descendiendo por detrás de la casa de vigilancia hasta llegar al aeródromo, en vez de coger el sendero recorrido de subida por el Barranco del Bou, nos vamos a buscar el Barranco de Almadic. Por el sendero por el que hemos venido siempre desde el Coll de Rates, así que cruzamos la pista de aterrizaje más al sur, y girando a la derecha hasta pasar 2 pinos, uno está torcido y a punto de caer una gran rama y desde allí llegamos hasta un raso donde se encuentran las ruinas de una casa y unas bañeras para dar de beber a los animales.
Este rincón es un vergel, con unas grandes carrascas, con mucha humedad en el suelo, con pastos para los animales... Está muy bien conservado, me imagino que hace muchos años esta sierra estaría cubierta por un extenso carrascal como este. Avanzamos por el sendero y reencontramos marcas blancas y amarillas y en apenas 5 minutos las marcas de GR blanca y roja (vienen desde Callosa d'Ensarria-Benigembla pero no sabemos que trazado tiene después, ni que número de GR es) que nos desvían hacia la izquierda, creemos que será el camino para poder atravesar esta muralla pétrea y encantados de no ir campo a través vamos descendiendo.
Una vez aquí deberemos fijarnos bien en las marcas, para avanzar unos metros girando a la izquierda del cauce por donde veremos el sendero entre la abundante vegetación pegado a la izquierda justo debajo de los abruptos peñascos.
Con cuidado descenderemos cruzando el cauce hacia la derecha hasta llegar a una pista ancha de tierra que tenemos a nuestros pies donde encontraremos a la derecha debajo de los peñascos junto a unos hermosos chopos, todavía sin hojas, el Pouet de la Peña Blanca. Una fuente pequeña con agua muy fresca.
Una vez aquí deberemos fijarnos bien en las marcas, para avanzar unos metros girando a la izquierda del cauce por donde veremos el sendero entre la abundante vegetación pegado a la izquierda justo debajo de los abruptos peñascos.
Con cuidado descenderemos cruzando el cauce hacia la derecha hasta llegar a una pista ancha de tierra que tenemos a nuestros pies donde encontraremos a la derecha debajo de los peñascos junto a unos hermosos chopos, todavía sin hojas, el Pouet de la Peña Blanca. Una fuente pequeña con agua muy fresca.
Continuando por el camino iremos siempre paralelos al barranco de Almadic pasando por el lado de unas colmenas hasta llegar a un cruce donde giraremos a la derecha y poco después junto a una casa medio en ruinas con unos huertos de olivares preciosos. Continuando por el sendero observaremos a nuestra izquierda una presa la cual dejaremos atrás, seguimos el GR.
Estando casi al final de la ruta saldremos del sendero hacia la izquierda a ver un olivo que nos impresiona con dos patas, y unos cerezos ya florecidos preciosos. Por un camino ancho asfaltado, Cami del Mirabó, continuaremos hasta llegar a la carretera donde giraremos a la izquierda llegando a Benigembla
Merece la pena visitar el Lavadero y la Font del Poble.Estando casi al final de la ruta saldremos del sendero hacia la izquierda a ver un olivo que nos impresiona con dos patas, y unos cerezos ya florecidos preciosos. Por un camino ancho asfaltado, Cami del Mirabó, continuaremos hasta llegar a la carretera donde giraremos a la izquierda llegando a Benigembla
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