SIERRA DE MAIGMÓ Y VÍA VERDE DEL TREN
FICHA TÉCNICA-
Día: 20/1/2018
Participantes: Julián y Lourdes.
Tiempo estimado: 5 horas.
Distancia: 13 km.
Desnivel: 799↑↓
Dificultad: Media-Alta
Como llegar: Desde Elche por el camino Castilla a buscar la autovía A-31 hacia Madrid. Salida hacia Orito que nos lleva a la CV 820 y a la derecha hasta el pueblo de Agost. Tomar la CV 827 y en el kilómetro 5 está la Casa Sarganella y enseguida un espacio para aparcar.
Wikiloc: https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/maigmo-por-la-cara-sur-ida-por-la-cruz-del-revolcador-vuelta-por-el-balcon-de-alicante-y-via-verde-22145344
ITINERARIO:
CV 827/Km 5-Casa de Sarganella - Vía del tren de Agost al Maigmó/PR CV 430 - Túnel 3 - SL CV 143 al Estret - Casa Conejera - Racó de Miquelet - Collado de Sarganella de Dalt - Pista - Paso pedregoso en el Barranco - Cruz del Revolcador - Maigmó - Collado - Balcón de Alicante - Urbanización Aljibe - Vía verde del tren de Agost al Maigmó - Restaurante la Cierva - Merendero - Túnel 1 - Túnel 2 - CV 827/Km 5-Casa de Sarganella
RUTA:
Aparcamos en el punto en el que la Vía Verde del tren pasa más cerca de la CV 827, conocida por todos los ciclistas y motoristas de Alicante por sus cerradas curvas.
Disfrutamos de vistas al coloso de piedra desde el primer momento. A la izquierda, enseguida pasamos el primer túnel siguiendo el PR CV 430. Aunque con esas piernas lo podemos cruzar por arriba.
Pero abandonamos enseguida el sendero de pequeño recorrido, para seguir las indicaciones del SL 143 que va en dirección a L'Estret.
Hacia el cual caminamos unos metros, pero en un campo a través, para la derecha, tomamos un brusco cambio de rumbo.
Debemos subir las terrazas de varias fincas y después por un camino llegamos al cruce. Rectos para introducirnos por una estrecha vereda en la que se intuyen rastros del paso de otras personas.
De frente las ruinas de Casa Conejera y una pista de tierra para acceder, no llegamos a su lado porque damos un giro a la derecha.
De frente las ruinas de Casa Conejera y una pista de tierra para acceder, no llegamos a su lado porque damos un giro a la derecha.
Vamos remontando por el interior de un barranco, por el Racó de Micalet.
Avanzando por el costado de las fincas escalonadas paramos a echar una mirada hacia atrás, surge el Cid y L'Estret.
A media ladera de la Sarganella de Dalt tenemos restos de las paredes de piedra de antiguos abancalamientos.
Delante vemos un collado hacia el que vamos casi rectos por un sendero andado y definido.
Y llegamos al espectacular collado, le llamamos de la Sarganella de Dalt, en el que creemos estar en medio de la nada. Solo se oye el sonido del canto de los pájaros.
Pero sorpresa, apenas descendemos unos metros la civilización regresa en forma de una pista de tierra(la que hemos visto en la Casa Conejera). Vemos de frente una senda dibujada en la loma de la colina, y pensamos que será la ruta a seguir(aconsejaríamos hacerlo, y rodear la peña por la cara Este). Pero nuestro GPS no nos lo indica, marca hacia la izquierda.
Bajamos unos pocos metros por la pista hasta hacer otro campo a través, a la derecha.
Nos dirigimos hacia el cauce del barranco, pero debemos ir por el lateral sin llegar a bajar a la rambla, porque tenemos una roca más alta para subir, y por el lateral nos situamos en el interior de una especie de canal, que ayudados de las manos en tres trepadas lo superamos. En ascenso es más sencillo, para bajar será más difícil.
Y cuando ganamos altura echamos una mirada hacia atrás. Vemos el Racó de Micalet, el collado, delante la peña rocosa y a su derecha el lugar por el que hemos accedido.
De frente tenemos toda una franja de rocas que no sabemos por donde podremos superar. Debemos ir rectos a buscar las peñas y una vez a su lado caminar paralelos a ellas, hacia la izquierda, por su base.
Dejamos grandes farallones a nuestras espaldas y caminamos buscando por donde podremos progresar.
En medio de la franja rocosa vemos un gran pino, este es el punto de inflexión, un paso sencillo, perfecto para superar las peñas.
Esto es lo que nos encanta de las sierras por el punto que menos esperas se abre un sencillo paso entre las infranqueables peñas.
Una parada para admirar la grandiosidad del paisaje.
Surgen al Suroeste el Cid, L'Estret, el Palomaret, los Rasos de Catí...
Observamos por donde hemos accedido, vemos el pequeño peñasco que hemos superado por una canal de piedra y hay una senda que parece que se escora hacia la izquierda, en descenso, para superarlo por el lateral, no tenemos la total seguridad pero parece la opción más sencilla.
Seguimos ascendiendo por la loma, en zig zags, teniendo vistas de la cumbre pétrea del Maigmó. Impresionante.
Subimos serpenteando hasta llegar a la Cruz del Revolcador, con vistas a la cara Oeste del Maigmó, al Maigmonet, al collado de Exau que se sitúa entre ambos...
Ha resultado sencillo el último tramo por la loma de la Cruz de Revolcadores, tal vez ha sobrado algo de calor.
Desde la cruz disponemos de panorámicas a la sierra del Cid, L'Estret, Rasos de Catí, sierra de Maigmó, del Frare...
Reemprendemos la marcha embelesados con nuestro itinerario de ascenso al Maigmó. Sopla el viento lo cual nos da un respiro, hemos pasado calor hasta ahora.
Amplias vistas a la Cruz del Revolcador y las sierras de detrás.
Y de frente maravillosas estampas al imponente Maigmó.
En la vertiente contraria también predomina la fisonomía abrupta, divisamos el roquedo del alto del Maigmonet.
Rectos, por la cornisa de la sierra vemos delante la omnipresente cumbre, la maciza peña con caída vertiginosa al barranco.
Y nos vamos aproximando a la parte trasera de la cumbre, Sur, que como podemos observar tiene menos piedra, es una ladera herbosa que nos permite subir cómodamente, sin cables, no como por su cara Norte más peñascosa.
Pero debemos afrontar su ascenso saliendo al sendero principal, antiguo PR CV 84, que sube por el Balcón de Alicante y ahí tomar hacia la izquierda.
Y acercándonos a las peñas encontramos el punto de acceso a la cima. Sopla el viento con fuerza, sacamos una foto al vértice geodésico y regresamos al canal al resguardo del vendaval. Hora de comer con estas inolvidables postales.
Una vez recuperadas las fuerzas retomamos la ruta. Bajando hay que tener cuidado, la piedra pequeña tiene su dificultad, y hay que procurar pisar bien para no resbalar.
Vemos todo el Norte de Alicante, las sierras de Aitana, Penya Migjorn, Cabeço d'Or, Puig Campana, Cabal, Els Plans, el embalse de Tibi...
A nuestra espalda ha quedado la cima pedregosa del Maigmó.
Antes había marcas blanca/amarilla de sendero de pequeño recorrido, pero o se han borrado o las han tapado. A pesaar de ello la senda se ve perfectamente, y nos encontramos con gente que baja y sube de forma intermitente. Hasta llegar al Balcón de Alicante.
En este punto un mirador permite ver Alicante ciudad y las sierras que rodean a la ciudad.
Nosotros tomamos por debajo de la terraza, rectos, para buscar un sendero que hace muchos años que recorrimos.
Un vistazo hacia atrás para divisar una cumbre tan emblemática, nos sorprende la cantidad de pinos de esta vertiente.
Y proseguimos con cuidado, el tipo de piedra es parecido en todo el recorrido, hay que extremar la atención, resbala un poco.
El trazado se escora hacia la loma del Cantal del Pichaor regalandonos imagenes de varias peñas que sobresalen de la sierra.
Disfrutamos de cada paso, de cada recodo, hasta llegar a la primera casa de la urbanización el Aljibe.
Una mirada al Cantalar del Pichaor que ahora lo vemos completo, y a la izquierda el collado del Balcón de Alicante de donde hemos partido.
Salimos a la CV 827, hacía la izquierda, con intención de ir rectos a tomar la senda verde de la vía del tren. Vemos la Penya Migjorn, el Cabeço d'Or... grandiosos.
Pero hay un pastor con sus ovejas y un par de perros grandes que nos hacen cambiar de idea.
Primero giramos hacia la derecha hasta llegar a una gran casa en ruinas, y luego a la izquierda para llegar casi rectos a tomar la senda verde de la Vía del tren.
Hacia la derecha. Pasamos enseguida al lado del Restaurante La Cierva, enfrente hay unos enormes cerdos al sol.
Mas adelante está con barandillas lo que parece ser un lago, pero que en este momento está seco. Los colores rojizos, verdosos, azules de sus laderas nos detienen a contemplarlo.
Después de un pequeño merendero tenemos el segundo túnel del día, hay un almendro en flor en su puerta. Es conveniente llevar un frontal o linterna, es largo y oscuro.
Unos metros más y surge un segundo túnel, su longitud y la falta de luz hacen que volvamos a usar los frontales.
A los lados del camino surgen peñascos.
Avanzamos con rapidez dado el escaso desnivel de la Vía Verde del tren.
Los últimos metros de nuestro paseo nos regalan enclaves como éste, merece la pena girarnos, recorrer con la vista la subida y hacer una parada de foto.
Desde el punto de aparcamiento, Km. 5 de la CV 827, sacamos la última foto de una ruta elaborada hace tiempo y que hemos terminado encantados de haberla realizado con éxito y disfrutado de cada paso que hemos dado.
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