Etapa 5ª: Candanchú - Formigal (Vértice geodésico del Anayet)
FICHA TÉCNICA-
Día: 14/08/2018
Participantes: Nieves, Chus, Javier y Julián.
Tiempo estimado: 8 horas y media.
Distancia: 20 km.
Desnivel: 1.192↑ 1.044↓
Senderos: GR 11
Dificultad: Media-Alta. Por distancia, desnivel.
ITINERARIO:
Candanchú - Camino de Santiago/GR 11 - Puente de Santa Cristina - Borda de Anglasé - Fundería Anglasé - Cruce a la izquierda (Camino de Santiago a la derecha) - Fuente del Cerezo - Río de Canal Roya - Refugio de Canal Roya o Cubilar de Lacuars - La Rinconada - Ibón del Anayet(Ibón grande) - Cuello del Anayet - Vértice geodésico del Anayet (2.555 m.) - Cuello del Anayet - Ibón del Anayet(Ibón grande) - Barranco de Culibillas - Estación de Esquí de Formigal - Corral de las Mulas/Aparcamiento/Carretera A-136, de Biescas a Francia
RUTA:
Salimos del hotel Candanchú, situado a 1.536 metros de altura, buena cena, buena habitación y estupenda compañía.
Salimos del hotel Candanchú, situado a 1.536 metros de altura, buena cena, buena habitación y estupenda compañía.
Descendemos por la carretera de la estación hasta encontrar las marcas del GR y Camino de Santiago -con las que compartiremos recorrido los próximos 3 kilómetros- poco antes de una gran curva. Dejamos a un lado los últimos bloques de apartamentos y salimos a una pequeña carretera que cruza el río Aragón y nos saca a la carretera nacional.
Giro a la izquierda, hay que cruzar la carretera y continuar por un camino ancho que se dirige a un pequeño collado dejando a la derecha una antena de telecomunicaciones. Descendemos ahora por senda hasta la casa de Anglasé dónde nos incorporamos a un camino que desde la carretera se dirige a la Canal Roya.
En pocos minutos llegamos al lado de la Chimenea del Anglasé (1.380m). Se trata de los restos de una antigua fundería de cobre y hierro que funcionó en los siglos XVIII y XIX.
En 3 minutos pasamos el cruce en el que a la derecha se separan el Camino de Santiago y la variante del GR11 por la canal de Izas. Continuamos para llegar en pocos minutos a la Fuente del Cerezo.
Seguimos por una pista, la cual abandonamos para adentrarnos por una senda, a la derecha, que nos permite cruzar el río por una pequeña pasarela para remontar el valle por la margen izquierda.
Echamos una mirada hacia atrás para ver el cauce del río, baja poco caudal. Enseguida desechamos un cruce a la derecha que nos llevaría al refugio de Chiniprés.
Tomamos la dirección que marcan los postes indicadores, hacia los lagos del Anayet. En pocos minutos nos situamos a las puertas del Refugio de Lacuars o de Canal Roya, a 1.565 metros de altitud, en mal estado.
Remontamos el valle, hay algún pino diseminado aunque finalmente terminan por imponerse los prados.
Así llegamos al Plano de La Rinconada, a 1.870 metros sobre el nivel del mar, una idílica explanada -fondo de un circo glaciar- al pie de la mole del Pico de Anayet.
La senda serpentea a la derecha de un salto de agua en busca del mejor terreno para ascender a los ibones hasta que termina por encaramarse al valle elevado que se abre a la derecha.
Después giro a la izquierda, al Sureste, en busca de los Ibones de Anayet (2.225m).
Después giro a la izquierda, al Sureste, en busca de los Ibones de Anayet (2.225m).
Los tonos rojizos de las paredes debajo de las cuales avanzamos nos hacen parar a disfrutar de este bello paisaje.
Atravesando el plano herboso -encharcado- hasta llegar al otro lado del lago dónde se abre el Barranco de Culivillas. La senda, bien marcada, desciende con rapidez y cruza en varias ocasiones el riachuelo que serpentea por el valle.
Las nubes corren ante nuestra mirada, tapando y destapando las cumbres.
Y llegamos al collado sobre el que se forma un enorme ibón, de tono chocolate debido a las intensas lluvias de los últimos días.
Estamos en una bifurcación. Desde este punto se puede subir al Anayet y al vértice geodésico del Anayet. Decidimos coronar este último, menos rocoso.
Las panorámicas de las que disfrutamos en el ascenso nos hacen paladear hasta la última imagen de las crestas que nos rodean.
Los tonos rojizos, lilas, verdes, grises y blancos del ascenso le dan a este pequeño
Regresamos hasta el lago del Anayet, al lado de caballos, vacas.. pastando decidimos reponer fuerzas. ¡Que lugar tan idílico!.
El descenso es largo y con gran desnivel. Sin prisa pero sin pausa bajamos en zigzags.
Hasta ver al fondo el gran complejo de hoteles construidos para esquiar en invierno.
La estación de esquí de Formigal, situada a 1.513 metros de altitud, tiene una valla que no permite subir a los coches en verano.
A unos 300 metros de la rotonda, parte un camino a la derecha que (cruza varias veces la carretera Formigal-Sallent de Gállego) sin mayor complicación nos deja en el Puerto del Portalet. Final de la aventura de este año por los Pirineos.
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