Machado

"Caminante, son tus huellas el camino y nada más; Caminante, no hay camino, se hace camino al andar. Al andar se hace el camino, y al volver la vista atrás se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar. Caminante no hay camino sino estelas en la mar". Machado.

lunes, 19 de octubre de 2020

SIERRA DE ANDÍA POR LA CARA SUR

DESDE ARGUIÑANO A EL ALTO, ZOIOLOGAÑA, ELIMENDI ESTE Y ELIMENDI OESTE. POR EL BARRANCO DE OBANTZEA


FICHA TÉCNICA-
Día: 19/10/2020
Participantes: Julián y Lourdes.
Tiempo estimado: 6 horas y media.
Distancia: 16 km.
Desnivel: 767↑↓
Dificultad: Media, por la distancia y desnivel.
Wikiloc: https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/arguinano-el-alto-zoiologana-y-elimendi-este-oeste-ida-por-barranco-de-obantzea-vuelta-por-cordal-s-58939483
ITINERARIO:
Arguiñano - Ermita de la Virgen del Camino y Cementerio - Calle de San Martín - Iglesia de San Martín - Pista - Barranco de Obantzea - Cartel y valla del Parque Natural Sierra de Urbasa-Andía - Abrevadero - El Alto (1.139 m.) - Zoiologaña (1.145 m.) - Elimendi Este o Peña Artesa (1.135 m.) - Paso en la valla - Elimendi Oeste o Peña Artesa (1.121 m.) - Balsa - Pista - La Tejería - Arguiñano - Calle San Antón - Fuente y Lavadero - Ermita de la Virgen del Camino


RUTA:
La ruta parte desde el pueblo navarro de Arguiñano, en el valle de Guesálaz. Nosotros aparcamos en las afueras, al lado de la ermita de la Virgen del Camino y cementerio.
Y yendo hacia la iglesia de San Martín, Jaime Munárriz nos cuenta que recuperó la senda por el Barranco de Obantzea. Gracias por rehabilitar el paso por un enclave irrepetible.
Subimos por el carretil hasta encontrar una pista, a la izquierda, que atravesamos en dirección al Barranco de Obantzea.
Enseguida vemos las dos sierras que se abren para formar un barranco.
Caminando por el sendero llegamos a un estrechamiento rocoso, pasando con facilidad para observar un estrecho desfiladero, apenas de unos metros, entre grandes paredones.


Las hiedras, musgos, helechos... se han apoderado de cada rincón.

A continuación caminamos por un angosto sendero entre bojes, robles... que nos impiden ver el interior del barranco, en algún punto el lateral contrario en el que abundan las hayas, con colores otoñales.


Surgen unos 20 metros en los que la vegetación está tan cerrada que nos impide el paso, agachándonos, subimos un poco y rectos conseguimos continuar.

Enfrente, en las oquedades de las rocas, observamos unos buitres.

Llegamos a un barranco que se cruza y va en dirección al fondo del cauce de Obantzea, abundan las hayas, aquí debemos cruzar el cauce, de forma sencilla, y tomar a la derecha siguiendo un hito de piedras (si vamos hacia abajo regresaríamos al principio del barranco, hacia Arguiñano). 


Disfrutamos de vistas parciales a los peñones que dejamos atrás, y delante.
Ya vemos delante unas rocas, en forma de cuevas, por debajo de las que vamos a pasar en pocos momentos.

Enseguida llegamos a una zona rocosa, con forma de cuevas, que rezuman gotas de agua. 
Los musgos crecen sobre cualquier roca, rama... Las ramas semejan fantasmas.
 

Nos recuerda a los paisajes de laurisilva canarios.

La belleza del entorno nos deja sin palabras, más vale una imagen...
Debemos atravesar una tapia de piedra seca.


Y otra más para atravesar a esta zona que parece una poza y una cascada en época de lluvias. La superamos por la parte izquierda de la imagen.
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Entramos por un laberinto, por la rendija que ha quedado entre dos escarpas pétreas altas y cortadas a plomo. Al fondo se cierra el paso y debemos regresar.


No habíamos visto el hito señalando, a la derecha, la vereda que progresa por encima del estrechamiento. ¡Cuidado! caminamos unos metros altos, por el filo de los farallones que nos han obligado a dar la vuelta. Avanzad prestando la máxima atención.
El paseo prosigue con algunos tramos en el bosque un poco más abiertos...

Pero todavía hallamos toda una ciudad de piedra cuyo estrecho paso es un placer para los sentidos.

Caminar por sus recodos, pasar por estrechos pasillos...
Y el barranco angosto se convierte en un sencillo paseo que enlaza con la pista que nos lleva a las Bordas de Arriba.

Pasamos una valla para dirigirnos por una zona abierta hasta un abrevadero. 
Desde él comenzamos el ascenso a El Alto, campo a través.
A nuestra espalda dejamos el Otsaurka.
En nuestro avance encontramos preciosas hayas.
Para llegar a El Alto (1.139 m.), vemos la cima de San Donato y nos dirigimos al Sur, hacia el Zoiologaña.

Una vez en la cima vemos de frente el Elimendi, la siguiente que vamos a hollar.


El brusco descenso es por el lateral de la tapia de piedra, reforzada con una alambrada, que con preciosas vistas nos lleva hasta una pista de tierra.
La bajada trepidante nos conduce hasta el pie del Elimendi, cuya ascensión iniciamos sin descanso adentrándonos en un frondoso hayedo, con enormes
ejemplares.


Situándonos en 
su extensa meseta, vamos en primer lugar al Elimendi Este

A continuación vamos por la cornisa con vistas al Barranco de Obantzea hasta el Elimendi Oeste. Ambas se llaman la Peña Artesa.



Descendemos usando un sendero difuso que nos lleva entre prados hasta una balsa y un abrevadero. Vemos detrás la Peña Artesa (o los 2 Elimendis)


Rectos nos dirigimos a buscar la pista que nos lleva, pasando por la Tejería, zona donde hay gran número de vacas y vistas al inicio del barranco de Obantzea y al pantano de Alloz, de regreso hasta el pueblo de Arguiñano.


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